Nogales, Sonora.
Decenas de familias de migrantes, continúan a la espera de ingresar a los Estados Unidos a las puertas de la garita Dennis DeConcini, con la esperanza de presentarse ante las autoridades de Aduanas del país del norte, iniciar un proceso legal y poder lograr reunirse con sus seres queridos y ofrecerles un mejor futuro a sus hijos, que es la visión que de manera generalizada comparten.
En un campamento improvisado los buscadores de asilo son de diferentes nacionalidades dentro de las cuales se cuentan los que llegaron de Venezuela, Haití, Guatemala, Colombia y donde también predominan los paisanos de diferentes zonas del sur de nuestro país.
Todo de acuerdo con sus testimonios vienen huyendo de la violencia que acabo en algunos casos con sus patrimonios, fuentes de empleo y engulló entre sus fauces a algunos de sus familiares, por lo que la idea de estos que esperan a las puertas de los Estados Unidos, es que sus hijos y en ocasiones nietos, no tengan que sufrir lo mismo que ellos tuvieron que atravesar para llegar a Nogales.
Desde el pasado lunes, día en que llegaron las primeras familias, los migrantes demostraron un sentido de solidaridad entre ellos, cuidando de manera comunitaria a los pequeños y para encontrar los servicios básicos de higiene, alimentación y salud, afortunadamente son muchas las instituciones entre ellas la Cruz Roja, quienes han estado al pendiente de su bienestar, sin dejar de lado el apoyo que les han ofrecido la dirección de salud municipal, protección civil, la policía municipal y la guardia nacional, quienes de manera constantes los visitan para cualquier tema que los aqueje.
También, los representantes de albergues locales, han estado presentes en su auxilio y los migrantes indican, que son muchos de ellos quienes pernoctan en las instituciones privadas y las proporcionadas por el ayuntamiento en donde mencionaron, hay encargados que velan por su seguridad y la de sus hijos, mientras ellos esperan su turno en la fila hacia el país del norte.
Algunos de este grupo manifestaron, que prefieren permanecer en el sitio inclusive en las noches, ya que no se sabe cuando las autoridades de la Agencia de Aduanas, abrirán la puerta y puedan cruzar hacia los Estados Unidos y presentar su caso, proceso que sostienen es sencillo, pero hay que esperar.
Describen que una vez que ingresan y de acuerdo con los informes de otros que ya han cruzado, se les traslada a un albergue en la ciudad de Tucson, en donde se contacta a sus familiares y se les permite viajar con ellos, aunque esto no ha sido confirmado hasta el momento por las autoridades de temas migratorios en los Estados Unidos.
Al mismo tiempo, el llamado oficial, es a realizar el proceso por medio de la aplicación CBP One, plataforma que sostienen es el único camino para ingresar de manera legal a los Estados Unidos y poder tramitar un asilo humanitario en caso de que sean elegibles, aunque confirmaron los migrantes si han ingresado, pero no se ha compartido que sucede una vez que estos se internan en el país del norte.
Según las estimaciones de los hermanos centroamericanos, al momento han cruzado alrededor de 150 familias al país vecino, con y sin el utilizar la aplicación CBP One, por lo que el permanecer en el sitio a pesar de las inclemencias del clima, la falta de servicios básicos e inclusive la inseguridad, es un precio bajo por lograr su cometido de entrar a los Estados Unidos.
