El ambiente en los bares y hogares mexicanos vibró el domingo pasado con la emoción del Super Bowl. La tensión, las apuestas amistosas y la pasión por el deporte rey se apoderaron de la noche
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El Super Bowl LVII rompió récords de audiencia, consolidándose como un evento deportivo de alcance global sin precedentes. Más de 126 millones de estadounidenses sintonizaron el encuentro entre los Philadelphia Eagles y los Kansas City Chiefs, una cifra que supera ampliamente las expectativas y marca un nuevo hito en la historia del fútbol americano.
Fox Sports reportó números asombrosos: un promedio de 126 millones de espectadores en Estados Unidos siguieron el juego a través de sus diversas plataformas, incluyendo la transmisión televisiva en Fox, Fox Deportes y Telemundo, además de la transmisión en streaming por Tubi y las plataformas digitales de la NFL. Estos datos preliminares, basados en las mediciones de Nielsen y plataformas digitales, prometen ser aún más impactantes tras la actualización final.
Este éxito arrollador no es una casualidad. Se trata del segundo año consecutivo con una audiencia récord para el Super Bowl, superando los 123,7 millones de espectadores del año pasado. Según Fox, el partido alcanzó un pico de 135,7 millones de espectadores en el segundo cuarto, un momento crucial que definió el rumbo del juego.
El streaming jugó un papel fundamental en este triunfo, alcanzando 14,5 millones de espectadores, con 13,6 millones solo en Tubi, donde el partido estuvo disponible de forma gratuita. Este incremento en la audiencia digital se atribuye, en parte, a la nueva metodología de Nielsen, que por primera vez incluyó a espectadores fuera de casa en casi todo el país, ampliando el alcance de la medición.
Más allá de las cifras, el Super Bowl ofreció un espectáculo inolvidable, con un juego electrizante que se definió en la primera mitad con una aplastante victoria de 24-0 para Filadelfia. La presencia de figuras como el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, y la cantante Rihanna, cuya actuación de medio tiempo fue un éxito rotundo, incrementaron el interés general del público.
La audiencia del Super Bowl se mantiene por encima de los 100 millones de espectadores por tercer año consecutivo, después de un periodo en el que cuatro de cinco juegos (anteriores a 2023) no lograron alcanzar esta cifra. Este dato contrasta con el promedio de los playoffs de la NFL, que registraron 35,2 millones de espectadores, un 9% menos que el año pasado. La temporada regular también experimentó una ligera disminución del 2% con respecto al año anterior, a pesar de registrar su sexto promedio más alto desde 1995.
Los datos, aún preliminares, pintan un panorama fascinante, donde la convergencia de la televisión tradicional y el consumo digital redefine la experiencia del espectador. Los resultados finales, que se esperan en breve, ofrecerán una perspectiva más completa de esta nueva era en el consumo de contenido deportivo.