México y Canadá: Batalla por el Mundial 2026
El ambiente en la concentración de la selección mexicana es palpable. La tensión, una mezcla de expectativa y responsabilidad, se respira en cada entrenamiento
El destino del Tri en la Liga de Naciones de la CONCACAF pende de un hilo. Este domingo, en el estadio SoFi de Inglewood, California, México se juega su pase a la final y, con ello, una parte importante de su camino hacia el Mundial 2026. La presión sobre Javier Aguirre es monumental, tras las recientes derrotas ante Canadá y la sombra del fracaso de su predecesor, Diego Cocca.
La semifinal contra Canadá representa una prueba de fuego para el 'Vasco' Aguirre. El historial reciente es adverso, con tres derrotas consecutivas ante los canadienses, un rival que ha demostrado un crecimiento notable en los últimos años gracias a figuras como Alphonso Davies y Jonathan David. La ausencia de César Montes, pieza clave en la defensa mexicana, complica aún más el panorama para el Tri.
Aguirre, consciente de la magnitud del reto, ha llamado a la precisión y a evitar errores. “Tenemos que hacer un partido perfecto, si queremos ganar no podemos equivocarnos en los pequeños detalles,” recalcó el entrenador, quien se enfrenta a una encrucijada táctica en la delantera. La duda principal radica en la elección entre Santiago Giménez y Raúl Jiménez, aunque la posibilidad de utilizar a ambos no está descartada.
La intensidad de los entrenamientos refleja la importancia del encuentro. Los jugadores, una mezcla de juventud y experiencia, se preparan para un partido que definirá no solo el futuro inmediato del equipo en la Liga de Naciones, sino también la credibilidad del proyecto de Aguirre de cara al ciclo mundialista. El ambiente es tenso, pero la esperanza de una victoria que inyecte confianza en el equipo persiste.
El rival de México en la semifinal, además de Estados Unidos y Panamá, representa un obstáculo formidable. Canadá ha dejado de ser el rival accesible de antaño, y esta vez, el equipo mexicano se enfrenta a un desafío considerable. El resultado definirá el rumbo del Tri, marcando un antes y un después en el camino hacia el sueño mundialista.
El silbatazo inicial se acerca. La incertidumbre reina, pero la determinación de los jugadores mexicanos es palpable. La victoria es crucial, no solo para avanzar en el torneo, sino para reafirmar las bases del proyecto y demostrar que México está listo para competir al más alto nivel.
