Maná florece a través de los años
CDMX
Hace más de tres décadas cuando Maná comenzaba como Sombrero verde, sus integrantes soñaban con una sola cosa: convertirse en unas verdaderas estrellas de rock, y si bien contaban con el ejemplo de grandes agrupaciones como Soda Stereo y Hombres G, ellos decidieron seguir el ejemplo de lo que jalaba a las masas en México, y figuras como Juan Gabriel, Los Bukis y Los Tigres del Norte se convirtieron en un referente del tipo de artista en el que querían convertirse.
“Para nosotros era muy interesante, porque mientras estaba el auge de bandas viniendo de Argentina y España, muchos de ellos, colegas y de quienes admiramos su trabajo, nosotros estábamos en México, entonces nos pusimos a ver quién estaba llenando los estadios, las plazas de toros y era Juan Gabriel, Los Bukis, Los Tigres del Norte, Los Temerarios, muchísima banda.
“Veíamos a Los Bukis con sus autobuses, tráileres, eran rockstars tocando música grupera, entonces dijimos: ‘Si nosotros pudiéramos lograr esto, pero con nuestro rock pop y hacerlo con ese esquema, pues increíble, y por eso los veíamos mucho porque tenían los mejores equipos y sus rolas conectaban con la gente, con la raza, y era un fenómeno tan increíble.
“Crecimos con esa gente que jalaba a las masas y eso fue también una inspiración muy grande para nosotros, porque Maná siempre quiso ser un grupo popular y ahora ve en lo que se convirtió”, compartió Alex, su guitarrista, en entrevista exclusiva con Excélsior en Houston, donde hoy darán un concierto como parte de su México, lindo y querido Tour 2023.
En la actualidad, la agrupación ya es considerada el fenómeno con el que siempre soñó, donde su único as bajo la manga ha sido entregar el todo por el todo para seguir satisfaciendo a su público y de paso conquistar a nuevas generaciones.
“Cuando salimos a tocar sigue habiendo una emoción muy grande, es como si fuera una final (de futbol) América-Chivas, lo digo en serio, llegamos con toda la carne en el asador y lo hacemos con la misma emoción, ya sea en Nueva York o Chimulco.
“Y la otra es que Maná tuvo la suerte de no entrar en ese proceso de crear como jabones o zapatos en una maquinaria y sistema de dinero-disco, dinero-disco; nosotros hemos hecho pocos discos para la carrera tan larga que tenemos, muy pocos, pero han florecido mucho porque ha habido un trabajo de fondo en todo esto que ha perdurado y esa canción que oyó el papá hace 30 años, Rayando el sol o el jefe o tu mamá, ahora ya la oíste tú y se va pasando de generación en generación entre todos”, celebró Fher.
“Es increíble, porque de repente leemos en el Instagram de Maná qué hay chavos y chavas que van a ver a Mana mañana (hoy) por primera vez y decimos ‘¡¿Qué?! ¡¿Por primera vez?!’ Entonces debes tocar cómo si fuera la primera vez para ti también, no puedes fallarle a esa gente, ¡a nadie! Entonces, tiramos todo arriba del escenario”, agregó Sergio emocionado.
Ahora el destino los vuelve a unir con el regional bajo su más reciente colaboración junto a Edén Muñoz, en una nueva versión de su éxito Amor clandestino, con dos versiones ya disponibles, una en banda y la otra en pop.
“Había oído algunas cosas de Calibre 50 (cuando Edén era el vocalista) y de ahí nos hicimos cuates, y él un día me dijo: ‘yo soy súper fan de Maná y lo haría (el dueto) con todo el gusto de mi corazón y le dije: ‘¡Órale, échale!’, porque tiene toda la experiencia y además es una canción a la que ya le traía ganas desde que la sacamos”, compartió Fher.
“Son arreglos con banda, Edén Muñoz se mueve en el regional mexicano, entonces, la idea era incorporar elementos de la banda a nuestra música y se logró una fusión interesante, oyes tuba, charchetas y acordeón junto con la armónica de Fher y obvio las dos voces”, explicó Sergio.
El sencillo formará parte de su próximo álbum Noches de cantina, el cual incluirá los duetos que han estado lanzando junto a colegas como Pablo Alborán, Joy de Jesse & Joy, Alejandro Fernández y Christian Nodal.
Un material con el que le dan un nuevo giro a éxitos como Rayando el sol, Te lloré todo un río y Eres mi religión, lo cual ha resultado un reto, pues sus versiones originales ya han quedado marcadas en la memoria de miles de fans.
“Creo que siempre alguien dirá: ‘a mí me gusta más la original’ y ‘a mí me gusta más la nueva’, es dependiendo, pero yo creo que un artista no tiene que quedarse con las ganas de hacer cosas. “A mí me parece que cuando tú ves tus obras como intocables o solemnes, eso déjaselo a los dioses, nosotros no somos músicos, hacemos canciones y yo he oído versiones alucinantes en mariachi de Mana, en banda, marimba y está ok, dices: ‘a mí me gusta más Mana’. Yo una vez escuché a un grupo cubano tocar Vivir sin aire y dije ‘qué bruto, nos rebasaron’. Así pasa, es otro vestido, así que no pasa nada, al que le guste lo compartirá”, expresó el vocalista.