Gomita abandona evento infantil por petición musical
El ambiente festivo del Día de Reyes en la Gustavo A. Madero, Ciudad de México, se vio interrumpido por un inesperado incidente que rápidamente se convirtió en tema viral
Un caótico evento infantil terminó con la influencer Gomita abandonando el escenario, dejando tras de sí una estela de controversia y memes en redes sociales.
La esperada presentación de Aracely Ordaz, mejor conocida como Gomita, en una fiesta infantil, se convirtió en un espectáculo inesperado. La artista, caracterizada como Maui de la película Moana, desató la furia de los presentes con su comportamiento.
Videos publicados en redes sociales muestran a Gomita exigiendo, con un tono que muchos calificaron de agresivo, la reproducción de una canción específica: “¡Necesito mi canción! La que ensayé hace tres meses, ¡si no la ponen, me voy!”, gritó ante la incredulidad de los padres y la confusión de los niños. La negativa del equipo técnico, aparentemente debido a problemas técnicos, provocó la huida de la influencer, dejando a medio terminar su presentación.
El público infantil, sorprendido por la situación, respondió con un espontáneo y unánime coro de "¡Adiós, Gomita!", un momento que se volvió viral instantáneamente en internet.
La controversia no se detuvo ahí. El atuendo de Gomita, descrito por muchos como inapropiado para un evento infantil, desató una ola de críticas en las redes sociales. Numerosos comentarios cuestionaron la elección de vestuario y la actitud de la influencer, generando un intenso debate.
La reacción de Gomita ha generado un amplio debate sobre la responsabilidad de las figuras públicas en eventos para menores de edad, cuestionando la idoneidad de contratar a personajes con un historial de controversia en este tipo de celebraciones.
Muchos usuarios en redes sociales señalaron la falta de profesionalismo de Gomita, contrastando su comportamiento con la imagen infantil que intentaba proyectar con su personaje.
El incidente plantea interrogantes sobre la proyección futura de Gomita y el impacto a largo plazo de esta controversia en su imagen pública, dejando una marca indeleble en el recuerdo de algunos pequeños asistentes y una lección para futuros contratantes.