Caso contra Marilyn Manson archivado tras cuatro años
La ciudad de Los Ángeles ha estado envuelta en un silencio expectante durante los últimos cuatro años; un silencio que se rompía solo con los ecos de un caso que parecía interminable, una investigación que se extendía como una sombra sobre la industria musical
Marilyn Manson, cuyo nombre real es Brian Warner, se enfrenta a un nuevo capítulo tras la decisión de la Fiscalía de Los Ángeles de no presentar cargos en su contra por las múltiples acusaciones de violencia doméstica y agresión sexual. El anuncio, que llegó tras una investigación de cuatro años, ha dejado un sabor agridulce, generando un debate complejo sobre la justicia, la prescripción de delitos y la dificultad de probar este tipo de acusaciones en el sistema legal.
La actriz Evan Rachel Wood, quien fue una de las principales acusadoras, denunció en Instagram en febrero de 2021 haber sido "adoctrinada y manipulada hasta la sumisión", compartiendo una experiencia traumática que resonó con otras mujeres, incluyendo la modelo Sarah McNeilly y la actriz Esmé Bianco, quienes también presentaron testimonios similares de abuso. Estas valientes mujeres, cuyo coraje se reconoció explícitamente en el comunicado oficial, contribuyeron a visibilizar la problemática del abuso y a impulsar cambios en el sistema de apoyo a las víctimas.
La investigación, dirigida por el Fiscal de Distrito Nathan J. Hochman y realizada en colaboración con el Departamento del Sheriff del Condado de Los Ángeles, determinó que algunas acusaciones habían prescrito y que otras carecían de la evidencia necesaria para asegurar una condena más allá de toda duda razonable. Esta decisión, que ha generado tanto alivio en la defensa como frustración entre los denunciantes, subraya los desafíos que enfrentan las víctimas al buscar justicia en casos de abuso doméstico y agresión sexual.
El abogado de Manson, Howard King, expresó su satisfacción con el resultado, recalcando la inocencia de su cliente. Manson, quien siempre ha negado las acusaciones y llegó a demandar a Wood por difamación (demanda posteriormente retirada), ha optado por no pronunciarse sobre la decisión judicial, prefiriendo, en cambio, promocionar su próxima gira por Norteamérica a través de sus historias de Instagram. Una decisión que, sin duda, ha alimentado la controversia.
Este caso, a pesar de su resolución, no cierra el debate. Resalta la necesidad de continuar perfeccionando los procesos judiciales para abordar este tipo de delitos, además de seguir creando espacios seguros y mecanismos de apoyo para las víctimas, quienes con frecuencia enfrentan obstáculos significativos para obtener justicia.
El silencio de Manson frente a la decisión judicial y su promoción de su gira, en contraste con el impacto duradero de las acusaciones y el testimonio de las mujeres, dejan en evidencia las complejidades de este tipo de casos y la larga lucha por la justicia en temas de abuso.
