Blake Lively busca desestimar demanda de US$400 millones
El mundo del entretenimiento a veces se asemeja a una compleja telaraña de relaciones, donde las colaboraciones pueden tornarse en conflictos legales de proporciones épicas; un reciente caso en la corte del Distrito Sur de Nueva York ilustra a la perfección esta realidad, con cifras millonarias y acusaciones de peso
Una bomba explotó en Hollywood: Justin Baldoni, actor y director, ha demandado a Blake Lively, su coprotagonista en "It Ends With Us", por 400 millones de dólares. La demanda, presentada en enero, alega difamación, extorsión y otros cargos graves, con Baldoni afirmando que las acciones de Lively le han causado un daño irreparable a su reputación y carrera. Su abogado, Bryan Freedman, ha declarado que las declaraciones de Lively han "destruido su reputación personal y profesional y su sustento".
Sin embargo, la historia no termina ahí. Lively, a través de sus abogados Mike Gottlieb y Esra Hudson, ha presentado una contundente contrademanda, rechazando las acusaciones y presentando su propia versión de los hechos. La actriz alega que Baldoni fue el que cometió acoso sexual en el set, incluyendo comportamientos inapropiados y la creación de un ambiente hostil. Ella presentó previamente una queja ante el Departamento de Derechos Civiles de California, detallando las alegaciones de comportamiento inaceptable por parte de Baldoni.
La disputa también incluye a Ryan Reynolds, esposo de Lively, y a su publicista, Leslie Sloane, quienes también fueron incluidos en la demanda inicial de Baldoni. Reynolds ya solicitó el despido de la demanda en su contra. Freedman, el abogado de Baldoni, ha descrito a Reynolds como un "actor clave en el esquema", intensificando aún más la batalla legal.
Ahora, en un giro sorprendente, Lively ha presentado una moción para desestimar la demanda de Baldoni, calificándola como un "abuso profundo del proceso legal que no tiene cabida en un tribunal federal". Sus abogados argumentan que la demanda de Baldoni está bloqueada por tres obstáculos legales: los privilegios de litigio, el informe justo y las leyes de protección contra el acoso sexual en California, que prohíben demandar a las víctimas que denuncian este tipo de situaciones. La batalla legal promete ser larga y compleja, con importantes implicaciones para todos los involucrados.
El desenlace de este caso judicial de alto perfil seguirá acaparando los titulares y dejando a la audiencia expectante ante la revelación de nuevos detalles que podrían cambiar el curso de la narrativa. El futuro de las carreras de Lively y Baldoni, así como la integridad de sus reputaciones, pende de un hilo en este complicado y mediático enfrentamiento legal.
