Sanz critica la música efímera de TikTok: "Prioriza la emoción, no la viralidad"
La efervescencia de las redes sociales ha transformado radicalmente la industria musical, acelerando ciclos de popularidad y generando debates sobre la esencia misma de la creación artística. En un panorama donde la inmediatez reina, la pregunta que muchos se hacen es: ¿hasta qué punto la búsqueda de la viralidad compromete la autenticidad musical?El reconocido cantante español, Alejandro Sanz, ha ofrecido una perspectiva única sobre este fenómeno, especialmente en el contexto de TikTok
Alejandro Sanz, en una entrevista reciente, desató un debate al expresar su opinión sobre la creación de música específicamente para TikTok. El artista, conocido por sus baladas emotivas, reflexionó sobre la creciente tendencia de componer canciones diseñadas para volverse virales en la plataforma, donde un baile bien coreografiado puede significar millones de reproducciones.
“La música para TikTok, en mi opinión, exige un tipo de sonido y estilo muy particular. Uno se pregunta si es necesario componer pensando sólo en eso...yo personalmente no lo haría, aunque no quiero decir que esté mal”, declaró Sanz. Su comentario revela una postura crítica, pero respetuosa, hacia la música creada exclusivamente para la plataforma. Reconoce la existencia de una fórmula, un género específico que tiende a funcionar mejor en TikTok, y sutilmente expresa su preferencia por un enfoque diferente.
Sanz enfatizó la importancia de la emoción en la creación musical, considerando que la música debería trascender la simple viralidad efímera de un baile: “Hacer música únicamente para que se vuelva viral con una coreografía, no es el espíritu de la música. Para mí, la innovación debe respetar la esencia original: emocionar, conectar, hacer bailar al mundo, pero de una manera más genuina, no con una fórmula preestablecida”. Esta declaración refleja la defensa de un enfoque más profundo, donde la conexión emocional con el público es prioritaria sobre la popularidad pasajera.
El cantautor distingue entre innovación y la creación musical orientada exclusivamente a la viralidad. Cree que la búsqueda de lo nuevo es fundamental, pero no a expensas de sacrificar la esencia y el propósito original de la música: conmover, inspirar y evocar emociones auténticas. Su punto de vista aporta una perspectiva valiosa a un tema candente en la industria musical actual.
La opinión de Sanz se suma a la conversación en curso sobre la evolución de la música en la era digital y el impacto de las redes sociales en la forma de crear y consumir música. Su perspectiva, matizada y reflexiva, enriquece este debate complejo, dejando claro que para él, la verdadera esencia de la música reside en la conexión emocional, más allá de las tendencias efímeras de las plataformas digitales.