Decidirá Senado permanencia de Trump

Omar ChiqueteNuevo Día/Nogales, ArizonaLa Cámara de los Estados Unidos votó el miércoles para enviar dos artículos de juicio político contra el Presidente Donald Trump, al Senado y aprobar a los fiscales de la Cámara para el tercer juicio político en la historia de Estados Unidos.La votación casi partidista trasladó la acusación de Trump, de la Cámara de la Demócrata Nancy Pelosi, al Senado, de mayoría republicana, donde Trump espera la absolución, incluso, cuando nuevas pruebas están planteando nuevas preguntas sobre sus negocios con Ucrania.La votación fue de 228-193, al comienzo de un año de elecciones presidenciales y un mes después de que la Cámara destituyó a Trump. El Presidente está acusado de abuso de poder, por su presión sobre Ucrania para investigar al rival demócrata Joe Biden, utilizando ayuda militar al país como palanca. Trump también fue acusado por obstruir la investigación subsiguiente del Congreso.“Estamos aquí hoy para cruzar un umbral muy importante en la historia de Estados Unidos”, dijo Pelosi, dirigiéndose a la Cámara, antes de la votación. Anteriormente, declaró: “De eso se trata un juicio político. El Presidente violó su juramento, socavó nuestra seguridad nacional, puso en peligro la integridad de nuestras elecciones”.Trump, durante un evento en la Casa Blanca, rechazó los cargos como un “engaño”.El equipo de enjuiciamiento de siete miembros estará dirigido por los Presidentes de los Procedimientos de Juicio Político, de la Cámara de Representantes, los representantes Adam Schiff, del Comité de Inteligencia y Jerry Nadler, del Comité Judicial, dos de los principales lugartenientes de Pelosi, por sólo la tercera acusación presidencial en la historia de la nación.Antes de la sesión del miércoles, Schiff publicó nuevos registros de Lev Parnas, asociado del abogado de Trump Rudy Giuliani, sobre la estrategia de Ucrania, incluyendo un intercambio con otro hombre sobre vigilar a la embajadora Maria Yovanovitch, despedida más tarde.Schiff dijo que la nueva evidencia debería ejercer más presión sobre el líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, quien es reacio a permitir que testigos testifiquen.“Si McConnell hace de este el primer juicio en la historia sin testigos, quedará expuesto por lo que es y eso es un esfuerzo para encubrir al Presidente”, dijo Schiff.Más tarde, el miércoles, los gerentes de la Cámara deben llevar los artículos por el Capitolio al Senado en una dramática procesión. El juicio al Senado comenzará el jueves.McConnell abrió el Senado desestimando lo que llamó una destitución apresurada que se trata más de la política de los demócratas, a quienes no les gusta Trump, que los cargos en su contra.“No se trata realmente de la política de Ucrania o del dinero militar”, dijo McConnell. “Esto ha sido un partidismo desnudo todo el tiempo”.Durante la conferencia de prensa de Pelosi, anunciando a los gerentes, Trump tuiteó que el juicio político era “otro trabajo fraudulento de los demócratas por nada. ¡Se suponía que todo este trabajo lo debía hacer la Cámara, no el Senado!”El juicio de Trump será sólo el tercer juicio político presidencial en la historia de Estados Unidos, y se presenta en el contexto de una nación políticamente dividida en un año electoral.Se espera que el Senado se transforme en un tribunal de juicio político tan pronto como el jueves, aunque los procedimientos significativos no comenzarán hasta el próximo martes, después del feriado de Martin Luther King Jr. La Constitución llama al Presidente de la Justicia a presidir los Senadores, que sirven como jurados y hacen un juramento para brindar “justicia imparcial”.Los gerentes son un grupo diverso con experiencia legal, policial y militar, en el tribunal, que incluye a Hakeem Jeffries, de Nueva York; Sylvia García, de Texas; Val Demings, de Florida; Jason Crow, de Colorado y Zoe Lofgren, de California.McConnell, quien está negociando las reglas para el proceso del juicio, está bajo la presión de su partido para obtener más testigos, de centristas que están del lado de los demócratas sobre la necesidad de escuchar el testimonio completo y los conservadores que montan la defensa de Trump.Los republicanos del Senado señalaron que rechazarían la idea de simplemente votar para descartar los artículos de juicio político contra Trump, como ha sugerido el propio Trump. McConnell acordó que no tiene los votos para hacer eso.McConnell dijo el martes. “Nuestros miembros sienten que tenemos la obligación de escuchar los argumentos”.Un número creciente de senadores dicen que quieren asegurarse de que las reglas básicas incluyan la posibilidad de llamar a nuevos testigos.La Senadora Susan Collins, de Maine, está liderando un esfuerzo entre algunos republicanos, incluidos Mitt Romney, de Utah y Lisa Murkowski, de Alaska, por los votos de los testigos.Romney dijo que quiere saber de John Bolton, el ex asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, quien, según otros, despertó la alarma sobre la política exterior alternativa hacia Ucrania dirigida por Giuliani.Los demócratas han estado presionando a los republicanos para que consideren nuevos testimonios, argumentando que ha surgido nueva información durante el retraso de un mes de Pelosi en la transmisión de los cargos.Los republicanos controlan la cámara, 53-47, y están casi seguros de absolver a Trump. Pero se necesitan solo 51 votos durante el juicio para aprobar las reglas o llamar a testigos. Sólo cuatro senadores republicanos podrían formar una mayoría con los demócratas para insistir en un nuevo testimonio. También se necesitarían sólo 51 senadores para votar para desestimar los cargos contra Trump.En el almuerzo privado del Partido Republicano del martes, el Senador Rand Paul, de Kentucky, advirtió que si se permiten testigos, también se podría llamar a testigos de la defensa. Él y otros republicanos quieren citar a Biden y a su hijo, Hunter, que formaron parte de la junta de una compañía de gas en Ucrania, Burisma, mientras su padre era vicepresidente.McConnell prefiere modelar el juicio de Trump en parte por el proceso utilizado para el juicio político de destitución del Presidente Bill Clinton, en 1999. También contenía mociones para destitución o llamar a nuevos testigos.McConnell duda en llamar a nuevos testigos que prolongarían el juicio y pondrían a los senadores vulnerables que serán reelegidos en 2020 en una situación difícil, con decisiones difíciles. Al mismo tiempo, quiere darles a esos mismos senadores un amplio espacio para mostrar a los votantes que están escuchando.