Aumentará temperatura tres grados el cambio climático

Aumentará temperatura tres grados el cambio climático
Hermosillo, Sonora.- De no establecerse medidas para mitigar los efectos del cambio climático en la actualidad, en 40 años la lluvia en Sonora se reduciría alrededor de 29% en invierno y 20% en verano.

  América Nallely Lutz Ley declaró que en el Noroeste de México varios investigadores han encontrado evidencias empíricas confiables de un proceso de calentamiento a nivel regional, algunos de estos casos incluyen específicamente cuencas en territorio sonorense.

  La investigadora titular A en el Centro de Estudios del Desarrollo de El Colegio de Sonora (Colson) también reveló que además de la reducción en la cantidad de precipitaciones se generaría un incremento en las temperaturas promedio estimado de 3.3ºC en invierno y 3.59ºC en verano.

  Explicó que estas cifras se proyectaron utilizando información de 23 modelos de circulación global aprobados por el Cuarto Reporte de Evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (por sus siglas en inglés, IPCC).

  Aunque las estimaciones se prevén para mediados del presente siglo o finales (2060-2090), señaló que en la actualidad a nivel estatal hay tres problemas tangibles que representan un reto ambiental por sus características.

  Estos aspectos son la sequía que caracteriza a la región, un proceso de desertificación relacionada a la pérdida de capacidad productiva de la tierra y un tercero, expuso, es el cambio climático.

  "Esos tres grandes problemas para esta zona son particularmente importantes y esos tres tienen efectos cascada sobre otros efectos ambientales, otros más localizados como cuestiones de biodiversidad y contaminación”, resaltó.

  Lo importante de estos factores, destacó, es que los tres tienen un componente humano fuerte, es decir, Sonora es un ecosistema natural árido, pero las acciones que ha realizado la población no son propias para este clima.

  “Las cosas que los sonorenses hacemos han ido agudizando esa situación porque no nos comportamos como si viviéramos en un desierto, porque agricultores y ganaderos de gran escala tienen ciertas prácticas que no son proambientales, porque existe una actividad minera intensiva, porque las ciudades consumen mucha agua”, abundó.

  Faltan agenda pública

  Ante esta situación, la investigadora mencionó que es necesario establecer una agenda o políticas públicas para modificar o gestionar el comportamiento a nivel colectivo para determinar cómo se consumen los recursos naturales.

  Con esas políticas públicas se acordarían las prácticas que se deben llevar a cabo en el campo y en la ciudad para mitigar los efectos del cambio climático.

  Manifestó que en las agendas de los gobernantes electos no se contó con componentes integrales para el medio ambiente, sólo propuestas aisladas como paneles solares o fondos revolventes para agricultores y ganaderos.

  “No figuran en los intereses en este momento, el tema de medio ambiente ha quedado relegado en la agenda, nos vamos acercando al cambio de gobierno, es el momento de brindar agenda y no hay claridad en la importancia”, opinó.

  Lutz Ley añadió que un plan de desarrollo sustentable es necesario, así como la adaptación humana al cambio climático en Sonora, ya que la próxima década vamos a empezar a ver incrementos en temperatura, sequías más frecuentes y más intensas.

  “Lo más grave es la sequía que estamos pasando, se les olvida que vuelve, eso es lo primordial, hay fenómeno de isla de calor, aumento masivo de temperatura por la forma que tiene la ciudad”, expresó.

  Entre las recomendaciones para la mitigación del cambio climático consideró una mayor forestación urbana, acciones que mejoren la movilidad urbana reduciendo la emisión de gases, así como la implementación de un programa integral para la recolección y separación de basura.

  Además, es necesario un diagnóstico sistemático que incluya proyecciones de temperatura y precipitación regionalizadas a nivel de cuenca, con una estimación de escenarios probables de los impactos hídricos, ambientales, económicos y sociales sobre las poblaciones humanas y los ecosistemas.

 

  También se propone designar y financiar adecuadamente a un cuerpo de expertos que acompañe a Cedes o a otro organismo responsable de la política de cambio climático a nivel estatal. Este organismo (Cedes) ha estado pobremente financiado y capacitado en esta materia.