La amenaza de deportación de refugiados ucranianos en Estados Unidos
La incertidumbre económica actual impacta de diversas maneras a la población, especialmente a los jóvenes adultos. Se observan cambios en los hábitos de consumo y una creciente preocupación por la estabilidad laboral; el futuro, para muchos, se presenta con un horizonte incierto, lleno de desafíos y adaptaciones

La sombra de la deportación se cierne sobre miles de refugiados ucranianos en Estados Unidos. A pesar del programa de parole humanitario de la administración Biden, que ofreció refugio a aproximadamente 240,000 ucranianos, la posibilidad de una expulsión inminente genera incertidumbre y angustia en estas familias que escaparon de la guerra.
Reportes de Reuters y CBS indican que la administración Trump planea revocar el estatus legal temporal de estos refugiados a partir de abril. Esta medida, parte de una estrategia más amplia para desmantelar los programas de parole humanitario que beneficiaron a más de 1.8 millones de migrantes, afectaría también a 530,000 cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos. La Casa Blanca, a través de su vocera Karoline Leavitt, ha negado una decisión final, pero un correo electrónico interno del ICE (Immigration and Customs Enforcement), obtenido por Reuters, sugiere la posibilidad de deportaciones expeditas sin plazos definidos.
El futuro incierto se refleja en la historia de Liana Avetisian, una ucraniana que, junto a su esposo e hija, huyó de Kiev en 2023 para encontrar refugio en Iowa. Con la expiración de sus permisos de parole y trabajo en mayo, se enfrentan a un limbo legal, habiendo gastado ya $4,000 dólares en honorarios legales para intentar renovar su parole o obtener el Estatus de Protección Temporal (TPS). "No sabemos qué hacer," declaró Avetisian a Reuters, expresando la desesperación de miles que se encuentran en una situación similar.
La compleja red de políticas migratorias y sus consecuencias se hacen palpables en las vidas de estas familias. La amenaza de deportación no solo representa la pérdida del refugio, sino también la ruptura de vidas reconstruidas con esfuerzo y sacrificio, poniendo en relieve el impacto humano de las decisiones políticas y la urgencia de buscar soluciones justas y humanitarias.